Iglesia de San Pedro Apóstol, Villabellaco. Románico Palentino.

Su construcción se inició en el s.XIII en el románico típico rural de transición,
pero a lo largo del tiempo vivió diferentes modificaciones (siglo XIII y del XVI al XIX)
y dos restauraciones en el siglo XX.
Está realizada en su mayoría en sillería de arenisca.
Al exterior, una torre fechada en 1802 se levanta orgullosa sobre el conjunto.
Sin embargo, las zonas más antiguas conservadas son la espadaña,
el ábside cuadrangular y la portada compuesta por guardapolvo,
dos arquivoltas y arco apuntado, cuyos capiteles muestran decoración vegetal
que recuerda a San Andrés de Arroyo.
Asimismo, aun se puede apreciar algún canecillo simple en la cornisa de la cabecera,
y una moldura de nacela que recorre todo el perímetro.
Curiosamente, su estructura apenas tiene vanos abiertos,
más allá de la puerta de entrada y alguna ventana.
Al interior, presenta gran variedad de cubiertas:
madera, bóveda de cañón y de cañón apuntado, y bóveda de crucería.
Los espacios están separados por varias arcadas,
siendo en una de ellas donde se conservan pinturas murales
con la escena de la Anunciación de los s.XVII y XVIII.
Asimismo, según R. Navarro en su Catálogo Monumental
existía una talla de la Virgen sedente del siglo XIII, hoy desaparecida.
También, se conservan dos retablos del s.XVIII, un Cristo Crucificado del XVII
y una cruz parroquial flordelisada decorada con esmaltes del XIV.